La campaña cuenta con un video explicativo y un folleto destinado a clientes y proveedores, así como una zona especial en la página web donde se explican estos controles de calidad. A la hora de elaborar abonos de la máxima eficacia, que cumplan con los requisitos normativos y que contengan exactamente lo que refleja las etiquetas del producto, es imprescindible controlar al máximo todo el proceso: la pureza de los minerales utilizados, los procesos de elaboración de cada tipo de abono, la correcta proporción de cada formulado, etc. Esa es la única forma de poder asegurar al cliente final de que lo que compra responde a las necesidades nutritivas de sus cultivos, según el tipo de suelo, clima, tipo de riego, etc.
En todo este proceso de control de calidad también es imprescindible el trabajo de los Centros de Investigación y Desarrollo de ICL Specialty Fertilizers, que están equipados con la más alta tecnología y con el mejor capital humano para poder desarrollar fertilizantes especializados en cada cultivo, programas de nutrición completos, productos fitosanitarios o semillas de césped del más alto nivel para las diferentes líneas de negocio.