El azufre destaca por sus múltiples aplicaciones en la agricultura, y muy especialmente como producto fitosanitario gracias a sus propiedades fungicidas y acaricidas para la protección de los cultivos. Por su parte, el azufre en polvo es una sustancia que favorece la optimización natural de los mecanismos de defensa de la planta, generando así una mejora gradual y duradera de su sistema inmunológico. Además, este tipo de azufre es una de las sustancias cuya capacidad de utilización se encuentra recogida expresamente en el Reglamento 889/2008 del Consejo de la Unión Europea, sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos, con respecto a la producción ecológica, su etiquetado y su control. Su utilización es, por lo tanto, altamente recomendable para el tratamiento fitosanitario de aquellas producciones agrícolas que cuentan con una certificación ecológica oficial.
Sin embargo, a pesar de sus numerosos y demostrados beneficios, existe en el sector una creciente preocupación generada por las restricciones establecidas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para el azufre en polvo para espolvoreo (DP) después de su registro por Principios Uniformes. Por el contrario, el azufre por espolvoreo está registrado en toda Europa y reconocido en todo el mundo, sin ningún tipo de restricción y muestra de ello son los más de 100 registros en distintos países del mundo que poseen las empresas productoras de azufre de nuestro país.
En este contexto, para defender los intereses de las empresas productoras de azufre en polvo y también los de los usuarios de los productos a base de esta materia prima, se ha fundado la asociación sin ánimo de lucro Sulphur Association. La entidad está impulsada por los principales productores de azufre en España -Azufrera y Fertilizantes Pallares, S.A.U., Julio Cabrero y Cía. S.L. y Productos AJF, S.L.-, y tiene como objetivos, entre otros muchos, promover el uso de azufre en diversos sectores donde esta materia prima tiene inmenso potencial de aplicación, como la agricultura; efectuar estudios sobre sus aplicaciones, empleo e impacto; actuar de forma activa en políticas públicas o en procesos de adopción de decisiones y actuar a modo de representación frente a la administración pública.