3. Protección integral para toda la planta.
Asimismo, gracias a la propia composición, la aplicación de azufre en polvo permite que este impregne todas las partes de la planta o del fruto, frente a las aplicaciones diluidas en agua, en las que la sustancia únicamente penetra en dirección vertical a su aplicación, como consecuencia de la gravedad.
Por tanto, el empleo de azufre en polvo garantiza que la planta se encuentre convenientemente protegida tanto en la parte superior como en la inferior del cultivo, evitando que el agua arrastre de forma desigual el azufre al resbalar por la superficie de las hojas.
4. Efecto de protección más persistente que otras sustancias y compuestos cuya forma de actuación es por contacto.
Debido a su propia composición química natural y a su aplicación como partículas sólidas, el azufre en polvo incrementa notablemente la persistencia de su efecto, reduciendo drásticamente el número de tratamientos necesarios para la obtención de los resultados fitosanitarios deseados.
De esta forma, gracias a su eficacia y eficiencia, el azufre en polvo permite un ahorro considerable del gasto que necesita el agricultor para garantizar la protección de sus cultivos.